La fabricación de un disco de vinilo en el siglo pasado, paso a paso.

El disco de vinilo, o simplemente vinilo, es un formato de reproducción de sonido.

A diferencia de los métodos de grabación de los sistemas electrónicos de reproducción de sonido actuales, la grabación era un proceso mecánico. La calidad de sonido era muy buena y, en contra de lo que pudiera parecer, las ventas de los discos de vinilo han aumentado en los últimos años, siendo muy apreciados por DJ's profesionales.

 A continuación podrá ver 18 fotografías de mediados del siglo pasado en el que se muestra el proceso de fabricación de un disco de vinilo. En algunas etapas parece más un taller de precisión que una fabrica de discos. También comentaremos el proceso de fabricación de estos discos. A pesar de la aparente complejidad, no se tardaba más de media hora en completar todo el proceso.

1. Una vez grabada, remasterizada y mezclada la música que queremos pasar al disco de vinilo en una cinta magnetofónica, como se hacía antes, o en un soporte electrónico, como se hace en la actualidad, esta se procesa para adaptarla al medio dónde va a ser impresa. Es lo que se conoce como re masterización. Es un proceso fundamental. Aquí se eliminan frecuencias, o no, se escoge el nivel de volumen, cuanto más volumen, mayor es el surco y menos tiempo de música cabe en el disco.

2. Esta segunda fase es conocida como "cortar el disco patrón". Es en este momento cuando se transfiere el contenido de la cinta remasterizada a un disco patrón. Se trata de un disco de metal, normalmente aluminio, recubierto de una laca de nitrocelulosa generalmente negra. El equipo que va haciendo los surcos sobre el disco patrón se llama "torno vertical de grabación fonográfica". Este torno va cortando el disco, haciendo surcos de mayor o menor profundidad y anchura.

3. Cuando finaliza el proceso de grabación, el disco es lavado con agua a presión. A continuación se recubre de una capa cloruro de estaño, la cual permite la fijación de una fina capa de plata.

4. A continuación se procede al niquelado del disco, sumergiéndolo en una solución especial a base de níquel a la que se aplica electricidad. Se lava de nuevo.

5. Se retiran las capas de plata y niquel, obteniendo un "negativo" del disco, lo que se conoce como disco padre o disco patrón.

6. Del disco matriz, se obtiene el llamada disco madre, una copia positiva. Se comprueba la información del disco y si es correcta, se repite el proceso hasta obtener ocho discos madre más. De cada una de las 8 copias del disco madre se hacen dos copias negativas, llamadas discos estampadores. Este proceso es llevado a cabo con el otro disco patrón que representa la otra cara del disco.

7. Una vez que se obtiene el disco estampador se saca la copia positiva final o copia comercial, mediante el prensado de una pastilla caliente o "donut" de policloruro de vinilo o poliéster entre los dos moldes estampadores o matrices correspondientes a las dos caras del disco, a la cual se añaden las etiquetas previamente preparadas que contienen la información de la música grabada. Esta copia final es la que se venderá al público. Actualmente se están prensando tiradas cortas de no más de 100 discos de vinilo con el disco patrón.